Antes que nada siento haber tardado tanto en subir el capítulo, a parte de que estaba demasiado ocupada con el verano, no sabía como finalizar la historia. Sí, por ahora este va a ser el último capítulo de esta historia, estoy pensando en hacer una nueva temporada, veré a ver si las ideas vuelven a mi. Aquí os lo dejo espero que comprendáis el hilo de la historia. Gracias por haber seguido día tras día este Blog.
La pequeña Lennon pasaba rápidamente
las páginas de aquel viejo libro que tenía entre sus manos. Abrió la boca
asombrada y su cara se volvía de un tono rojizo enfurecida.
-¡No hay más! – Exclamó cerrando el
libro.
J. Stuart: ¿Qué ocurre Millie? – Preguntó
su padre extrañado.
Millie: Ya no hay más páginas escritas
en el diario. – Dijo la pequeña - ¡¿Qué más sucedió?!
J. Stuart: ¿A que te refieres? – Le preguntó
curioso.
Millie: ¿Qué más ocurrió con la
abuela? – Se cruzó de brazos esperando la respuesta de su padre.
J. Stuart: Ya sabes la historia, has
leído todo lo que sucedió. – Respondió.
Millie: ¿Pero que pasó con los demás? –
Preguntó impaciente - ¿Qué ocurrió con el abuelo John? ¿Y con George?
¿Volvieron a ver a Astrid? ¿Qué más?
J. Stuart: Tranquila Millie. – Le calmó
– Ya sabes que John se casó con Yoko y se fueron a vivir a Nueva York, allí
tuvieron a Sean. Y sí que volvieron a ver a Astrid.
Millie: Pero la abuela también me
contó que John volvió a Liverpool. – Se explicó – Cuando vivíais allí con el
abuelo Paul.
John se levantó del sillón y fue a la
cocina a por un poco de té.
J. Stuart: Eso es una larga historia
Millie. – Dijo sirviéndose más té en la taza.
Millie: ¿Por qué hay páginas
arrancadas del diario? – Dijo abriéndolo y observándolo mejor.
J. Stuart: Todos tenemos nuestros
secretos. – Explicó – Incluida la abuela.
La pequeña sonrió esperando el comienzo de aquella apasionante historia que su padre le iba a contar sobre el pasado, sobre el ayer.