16 de diciembre de 2012

50. Who was it?


REMINDER: En capítulos anteriores hemos descubierto como aunque la relación de John y Charlotte, se haya roto por completo entre ellos queda una gran amistad y un vínculo que les une, su hijo. Por otra parte pronto una llegada inesperada romperá el orden y el estilo de The Beatles que todos conocían.

London; Verano, Agosto 1967

Tres semanas más tarde de haber celebrado el cumpleaños de mi hijo, me encontraba de camino a los estudios, como un día cualquiera. Había dejado a la Señora Smith cuidando de John en nuestra casa.

Al parecer seguía lloviendo, al igual que ayer, unas fuertes lluvias de verano. Me dirigía hacía el coche tan tranquilamente cuando de repente me topé con una señora que se había parado justamente delante de mi, pero que no pude ver, debido a aquel paraguas vainilla que le tapaba la cara.

- ¿Charlotte? – Preguntó asombrándome.

Alcé mi paraguas y de repente me encontré con aquel rostro tan conocido pero a la vez tan cambiado, que hacía tantos años que no veía.

Tu: ¿Merce? – Pregunté con los ojos abiertos - ¡Merce!

Aquella mujer sonrió y asintió rodeándome con un brazo mi cuello. Fue un encuentro tan agradable y a la vez tan emocionante, que no pude resistirme a dejar caer unas lágrimas.

Por lo tanto olvidé de repente hacía donde me encaminaba y la llevé a mi piso para ponerla al día de todo lo que había pasado durante estos años atrás.

Merce: Realmente es un niño precioso. – Dijo sonriente – Tiene un gran parecido a John.

Tu: Si. – Asentí – No me puedo creer como has cambiado.

Merce: Ni yo en la mujer que te has convertido. – Rió – Han pasado tres años, y tantas cosas entre ellos que aún no me lo puedo creer.

Tu: Bueno y cuéntame. – Le dije bebiendo de mi taza de té - ¿Cómo es que acabó tu relación con Bob?

Merce: Los años cambian a la gente. – Asintió – Y ambos cambiamos hacía polos opuestos, a parte si te soy sincera, no pude soportar sus salidas nocturnas. Tal vez lo mismo que te hizo marchar hacía Hamburgo.

Tu: Tal vez. – Asentí.

Merce: Pero no puedo creerme que la relación con John se acabase así. – Negó – ¿No hubo un intento en tu regreso por continuarla?

Tu: Si, pero no. – Me encogí de hombros – Las cosas no son como antes, tú misma has dicho que el tiempo cambia a las personas y es cierto.

Merce: ¿Y Michelle y Paul, también finalizó su relación? – Preguntó – Es tan triste, que es todo esto haya ocurrido. Al menos Heidi por lo que sé, sigue con Mick.

Tu: Si. – Asentí – Heidi sigue con Mick, durante todo este tiempo.

John siguió jugando, mientras poco a poco nos observaba interesado por saber quien era esa persona con la que estaba hablando.

Merce: ¿Y no hay ningún hombre más en tu vida? – Preguntó - ¿Ningún Alemán por Hamburgo? ¿O algún Inglés?

Tu: No – Reí – Por ahora solo quiero centrarme en mi hijo, y el tiempo dirá. ¿Y en la tuya?

Merce: Nadie. – Negó encogiéndose de hombros – Tuve algo después de que finalizara mi relación con Bob, con un chico de Nueva Jersey. Pero no cuajó.

De repente el teléfono comenzó a sonar cortando nuestra conversación, pero antes de que lo pudiese coger la Señora Smith ya estaba respondiendo.

Sra. Smith: ¿Dígame? – Preguntó – Si, si. ¿La señorita Sutcliffe? – Me observó y asentí – Si, si encuentra aquí. Por supuesto señor Lennon. – Me acercó el teléfono – El señor Lennon, quiere que se ponga.

Cogí el auricular del teléfono y contesté, pensé que querría saber donde me encontraba al habérseme olvidado por completo que tenía que ir a los estudios.

Tu: ¿Dígame? – Pregunté.
John: ¿Charlotte? ¿Te ocurre algo? – Preguntó preocupado.
Tu: No John. – Respondí – Simplemente me he retrasado un poco.
John: Me había preocupado, por ver que no venías a los estudios. – Se quejó.
Tu: Lo siento, es que me he recibido una buena visita. – Sonreí observando a Merce.
John: ¿Una buena visita? – Preguntó extrañado - ¿De quien se trata?
Tu: De una gran persona. – Sonreí – No tardaré en llegar a los estudios John, entretén a Brian si es necesario. Hasta pronto.

Colgué rápidamente antes de escuchar su despedida. Merce se levantó del sillón y tras despedirnos de mi hijo y de la señora Smith salimos al portal.

Tu: ¿Te vienes? – Le pregunté sacando las llaves del coche.

Merce: No. – Negó con la cabeza – Antes tengo que ir a hacer unos recados y una visita a mis familiares.

Tu: ¿Quieres que te acerque a algún sitio? – Pregunté con el paraguas en la mano.

Merce: No, gracias Charlie. – Sonrió – Estamos en contacto ¿De acuerdo?

Tu: Eso dalo por asegurado Merce. – Asentí - ¿Te quedarás mucho tiempo en Londres?

Merce: Unas semanas. – Asintió – Más tarde hablamos. Me ha encantado volver a verte Charlotte y conocer a tu hijo.

Tu: A mi también Merce. – Sonréi – Hasta pronto.

Entré al coche y con un suspiró introduje las llaves en el contacto, para dirigirme lo más rápido posible a los EMI Studios.

Pude comprobar como los coches de los cuatro de Liverpool, de Brian, George Martin y demás se encontraban aparcados en el pequeño aparcamiento, por lo que también entré el mío.

Bajé y subí las escaleras deprisa, saludando con una sonrisa a la secretaría que se encontraba en el mismo puesto de siempre y tras llamar a la puerta entré en el despacho donde se suponía que se encontraba Brian junto a Heidi, con el sobre de fotografías en la mano que tenía que haber entregado ese día.

B. Epstein: ¡Ya era hora Charlotte! – Exclamó – No sabes que día llevo hoy.

Tu: Lo siento Brian, me he retrasado. – Me disculpé – Pero ya tengo las fotografías aquí, para el nuevo Álbum.

B. Epstein: Perfecto, al menos algo me sale bien en el día de hoy. – Asintió – Porque entre lo ocurrido con Paul y el desorden de entrevistas previstas, no sé que hacer. A parte se debería finalizar la grabación de Your mother should know, pero con el retraso que llevamos encima, no creo que la acabemos.

Tu: ¿Lo ocurrido con Paul? – Le susurré a Heidi.

Heidi: Ya le verás. – Murmuró, negando y suspirando.

B. Epstein: Charlotte, ahora después necesito que me enseñes los diseños para la nueva portada de Magical Mystery Tour. Sé que aún queda para la publicación, pero necesito ver diseños. – Me explicó – Heidi, tú mientras ves haciendo esas llamadas, para concertar las entrevistas, a ver si lo podemos solucionar. – Le ordenó – Necesitaría que sacases unas fotografías para enviar a hacer unos carteles de promoción, pero no creo que hoy sea el mejor día, con lo que le ha ocurrido a Paul.

Me quedé extrañada, y bajé abajo con la excusa de que Brian me había pedido sacar unas fotografías. Llamé a la puerta de los estudios y me encontré con George Martin charlando con el ingeniero de sonido, entretenidamente. Por lo que entré y me aproximé a los chicos, todo me pareció normal, hasta que vi darse la vuelta a Paul. Y me quedé perpleja.

Tu: ¿Pero que te ha…? – Pregunté rápidamente.

Paul: No importa. – Murmuró con el labio completamente hinchado, y donde se podía observar unos puntos cosidos en la parte superior.

Ringo: Impresiona ¿Eh? – Dijo.

John: El listo de Paul, decidió coger anoche la moto. – Me explicó – Al parecer tomó demasiado fuerte una curva y salió despedido. Y aquí le tenemos, con la cara medio cortada.

Paul: No exageres John. – Se quejó, sin mover claramente el labio de arriba. – No ha sido para tanto.

George: No, simplemente te has hecho esos arañazos por la cara, ese corte en el labio superior y te has roto un diente. – Explicó cogiendo su guitarra.

Me aproximé hacía Paul, donde pude contemplar todo aquello que había definido George, al parecer no se sentía cómodo al ver que le observaba tan de cerca y se intentó alejar de mi, pero le sostuve por el mentón.

Tu: Debes de curarte esas heridas todos los días. – Dije observándole – Has tenido suerte de que no haya ocurrido una desgracia Paul.

George: Y a parte de las heridas también los dientes. - Murmuró.

Paul: No ha sido para tanto. – Dijo apartando mi mano de su cara – Estoy bien, luego tengo que ir al dentista.

John: Ya no eres tan atractivo como antes. – Bromeó.

Tu: El atractivo no siempre está en la apariencia John. – Le expliqué.

George: Por lo tanto ha querido decir que eres feo, y que estuvo contigo no por tu belleza, si no por como eras. – Le explicó – Lenguaje femenino.

John: ¿Quieres cerrar la boca o te la cierro yo? – Miró furtivamente a George, el cuál se encogió de hombros.

Dejé mis cosas en un asiento que se encontraba apartado y cogí la cámara fotográfica para acercarme a ellos.

Tu: Debería de haberos sacado unas fotografías, pero creo que no es el mejor momento. – Les expliqué – Debido a como se encuentra Paul.

Ringo: No creo que Paul quiera salir así. – Arqueó las cejas.

Al escuchar a Ringo hablar, no sé por qué me llegó a mi mente una imagen de Merce esta mañana cuando me la había encontrado. Pero guardé silencio y no comenté nada de lo ocurrido.

Los chicos estaban teniendo su merecido descanso, y lo dedicaron a fumar y a charlar de las nuevas canciones y otros temas.

John: Por cierto. – Alzó el dedo - ¿Quién fue esa buena visita por la que te has retrasado?

Tu: Una buena visita. – Me encogí de hombros y sonreí.

John: ¿Un hombre? – Preguntó interesado.

Tu: ¿Por qué estás tan interesado? – Le pregunté.

John: ¿Interesado? – Se rió – Yo no me encuentro interesado.

El silencio culminó los estudios, pero poco duró gracias a que John volvió a intervenir.

John: Simplemente me preocupo con las personas que se encuentran alrededor de mi hijo. – Dijo encogiéndose de hombros.

Tu: Tranquilo no debes preocuparte por ello. – Dije molesta.

John: Si que debo preocuparme por ello, es mi hijo y si la madre de mi hijo se junta con otros hombres debería saber si son buenas influencias. – Repitió seriamente - ¿Era un hombre?

Ringo: John, ya basta. – Se acercó a él – Déjalo ya.

Tu: Estás exagerando John. – Dije calmada – Y no era un hombre, ya sabes aquello que te interesaba saber. Y si piensas que juntaré a nuestro hijo con malas influencias estás demasiado equivocado.

Suspiré y me acerqué a mi asiento a coger las pertenencias debido a que no iba a sacar las fotografías por lo ocurrido con Paul.

Tu: Me marcho, decirle a Brian que mañana tendrá los nuevos bocetos para Magical Mystery Tour. – Les comenté – Que vayan bien las grabaciones.

Ringo: Charlotte, no te marches aún. – Rogó.

George: Venga Charlotte. – Dijo quitándose la guitarra.

Tu: No, tengo que ir a hacer unas cosas. – Les expliqué – Mañana nos vemos.

Por último pude ver como John se alejaba sin decir nada a coger su guitarra y Paul le seguía intentando hablar con él.
Me despedí con la mano y entré para despedirme de George Martin para después marcharme a hacer los bocetos a casa.

2 comentarios:

  1. He vuelto!!! yay!!! Y he conocido al pequeño John, que tierno :3. Mi encuentro con Charlie fue una verdadera casualidad jajajajaja (para que digo todo esto?? xD)
    Y pobre Paulie, tuvo un accidente, ahora tendrá que conseguir que Charlie le cuide jajajaja
    Sube pronto Lara!!! ADORO TU FIC!!!
    Muchisisisimos besos y abrazos, cuidate mucho :3

    ResponderEliminar
  2. John cada dia es mas maldito xDD
    Como de que ya no ama a Charlie ¬¬
    Es tu oportunidad McCartney! :DDD hgftdjyhbh
    Adoro esto <3 te mando un abrazo asfixiante :33

    ResponderEliminar