36. Rejected proposals.

Londres; Verano, Julio 1971

Era una calurosa mañana de principios de verano, me encontraba en casa sentada en el sillón viendo como John jugaba con una pequeña pelota que le habíamos comprado el día anterior.

Mi esposo se encontraba felizmente en el jardín acabando de arreglar el columpio para John que hace un par de días se había roto. 

John: ¿Mamá cuando iremos a Liverpool? – Preguntó por tercera vez en el día de hoy.

Tu: Cielo, ya te he dicho que muy pronto. – Le recordé – Hay que esperar un par de semanas más.

John: Tengo ganas. – Dijo emocionado.

Le habíamos prometido llevarle a Liverpool por este verano, recuerdo que fuimos una vez y quedó impresionado al llegar, por lo tanto siempre que podíamos volvíamos a ir, también para que mi madre y demás pudiesen disfrutar de él. Al igual que Astrid que siempre que podía nos hacía una visita.

El teléfono comenzó a sonar y como un rayo John se levantó a cogerlo.

John: ¿Dígame? – Preguntó sonriente – Si, está aquí. No él está fuera. Vale.

Me levanté y John me dio el teléfono en la mano.

John: No me ha dicho nombre. – Se encogió de hombros – Creo que es el tío George.

Tu: ¿El tío George? – Pregunté desconcertada - ¿Dígame?

- ¿Charlotte? – Preguntó en la otra línea de teléfono – Soy George.

Tu: ¡Vaya! – Exclamé – Hola George, ¿Qué tal todo?

George: Muy bien Charlie. – Respondió - ¿Y por allí? ¿Cómo van las cosas? Me comentó mi esposa que estabas embarazada.

Tu: Si. – Afirmé feliz – Todo marcha perfectamente.

George: Enhorabuena. – Me felicitó – Te preguntarás para que había llamado y la verdad es que llamaba para hablar con tu marido, esta vez.

Tu: Vaya… - Asentí – Está fuera arreglando un par de cosas en el jardín, espera un momento que ahora le aviso.

George: Perfecto, gracias Charlie.

Dejé el auricular boca abajo y salí al jardín para avisarle que tenía una llamada realmente importante.

-  ¿Qué te parece? – Dijo mi marido señalándome sonriente el columpio – Ya está casi arreglado, creo que sostendrá incluso mi peso.

Tu: George ha llamado. – Le intervine.

Me miró y se pasó la mano por la frente quitándose el sudor y apartándose el flequillo que le caía siempre.

-  ¿George? – Preguntó asombrado - ¿Y qué quería?

Tu: No lo sé. – Me encogí de hombros – Quiere hablar contigo, está esperando en el teléfono.

Mirando al suelo pensativo asintió y entró dentro de casa, donde nos encontramos a John hablando por el teléfono.

John: Si, ya tengo cuatro años, dentro de poco cumpliré cinco. – Dijo sonriente - ¡Oh! Ya está aquí, adiós tío George.

Le pasó el auricular a mi marido que rió y le acarició el pelo.

- ¿Si? – Preguntó cogiendo el teléfono – Pues como puedes ver si que me he puesto. – Dijo serio.

Marché al salón junto con John para dejarle intimidad, John volvió a coger la pelotita y un coche que se encontraba por el suelo y se puso a jugar sin ninguna preocupación.

A los minutos mi esposo entró con una cara de seriedad y decepción.

Tu: ¿Qué ocurre? – Pregunté acercándome a él - ¿Qué quería George?

- Me ha comentado que estaba organizando un evento para recaudar fondos, para la tragedia de Bangladesh. – Me explicó – Dice que también ha avisado a los demás.

Tu: ¿Y que le has dicho? – Pregunté con interés - ¿Has aceptado?

-   Me he negado. – Respondió.

Para después marcharse junto con John al jardín.

Y AQUÍ ACABÓ ESTE CAPÍTULO, EL PRÓXIMO SERÁ CONTINUACIÇIÓN DE LA HISTORIA NORMAL. ESPERO QUE OS HAYA GUSTADO, MUCHAS GRACIAS POR LEER Y POR LOS COMENTARIOS.