REMEMBER: Anteriormente Charlotte se había marchado de Londres, donde tenía su vida junto con los cuatro de Liverpool, trabajando de fotógrafa para el grupo. Ella y John compartían casa, debido a su relación amorosa que surgió al paso del tiempo y al hijo que comparten ambos. Pero han debido de ocurrir algunos sucesos para que ella marchase camino de Hamburgo, donde se encuentra ahora y recuerda aquellas situaciones que la han obligado a marchar.
Hamburgo; Invierno, Marzo 1967.
Escuché como provenía
del piso de arriba un llanto, y dejé lo que estaba haciendo para ver que le
pasaba al pequeño John.
Lo cogí en brazos y
besé su pequeña cabecita, miré la hora y bajé a preparar el biberón, que
debería de haberse tomado hace poco.
Tu: ¿Tienes hambre? –
Pregunté sonriente – Ahora te preparo el biberón, quédate aquí que ya vengo.
Lo dejé acomodado en
el sofá entre un par de cojines y calenté la leche, cuando el timbre hizo que
me asustara de repente y se me derramara un poco por el suelo.
Tu: Maldita sea. –
Murmuré limpiando con una servilleta - ¡Ya voy!
London; Otoño, Septiembre1966
Me encontraba en casa junto a nuestra ama de llaves, que John se había empeñado en que tuviéramos y
así me ayudaría y me facilitaría el trabajo con el pequeño John. Sería la una
de la madrugada, y aún no había regresado a casa.
Mrs. Smith: No tardará
en regresar a casa señorita Sutcliffe. – Me intentó calmar – No se
intranquilice.
Tu: Me prometió que
llegaría para la cena. – Le expliqué – Tal vez le haya pasado algo.
Mrs. Smith: Seguro que
se encuentra perfectamente. – Sonrió dulcemente – Se habrá retrasado charlando
con el señorito McCartney y los demás.
Tu: Tal vez. – Asentí.
Escuché un coche venir
y entrar dentro del jardín, ambas voces y risas procedían de él. Me asomé a la
ventana y vi como John no venía solo, si no acompañado con un nuevo conocido del grupo, el cuál se había ganado gran parte de confianza de Brian, Derek Taylor, era periodista y debido a la marcha de Merce, muchos
artículos eran cubiertos por él bajo su supervisora, Heidi.
Mrs. Smith: ¿Voy a
abrir la puerta? – Me preguntó nerviosa.
Tu: No, déjeme. –
Negué con la cabeza – Ya les recibo yo directamente.
Me acerqué y abrí la
puerta viendo como los dos me miraron impactados por mi presencia allí.
John: Vaya… - Murmuró.
Tu: ¿Vaya? – Pregunté
arqueando las cejas – Pensé que vendrías a cenar.
Derek: Bueno, yo creo
que será mejor que me vaya. – Se frotó los ojos – Buenas noches.
Bajó los escalones
como pudo, debido a su gran estado de ebriedad, que llevaba en el cuerpo.
John: Me retrasé. –
Rascó su cabeza.
Tu: ¿Dónde has estado?
– Pregunté con curiosidad y preocupación.
John: Eh… - Llevó la
mano a su frente – No lo recuerdo. ¿Puedo pasar?
Día tras día, escenas
como estas se iban repitiendo cada vez más. Recurrí a charlar con Ringo, que
simplemente sabía decirme que John iba a tomar copas con Derek noche tras
noche. George me decía lo mismo, y aunque le explicaban que sería lo mejor
marcharse a casa tras pasar todo el día en el estudio, no prestaba del todo
atención.
Mi vida se estaba
volviendo realmente monótona. Tras tener al pequeño John, no salía casi para
nada de casa, me pasaba los días allí encerrada cuidando y siendo ayudada por
la señora Smith, pero aún así echaba de menos mi trabajo junto a ellos.
London; Otoño, Octubre 1966
Marché a la ciudad,
aquella tarde noche tenía interés en ir a visitar los estudios y ver como iban
las cosas por allí. El pequeño John se había quedado en casa al cuidado de la
Señora Smith, que estaba encantada con él.
Bajé del taxi y saqué
el paraguas debido a la intensa lluvia que estaba cayendo aquel día. Entré
rápidamente y saludé a la secretaria, que muy amablemente me dedicó una sonrisa
y me expresó lo bien que estaba después del embarazo.
Subí las escaleras,
llevaba algo de comer, porque sabía que se quedarían aquí a cenar y pensé en
cenar con ellos como en los viejos tiempos. Nada más abrir la puerta…
Ringo: ¡Charlotte! –
Sonrió y me dedicó un pequeño abrazado – Que ilusión el que hayas venido. Las
cosas están alborotadas por aquí sin ti.
George: No exageres
Ringo. – Golpeó su brazo – Me alegro que hayas venido. ¡Oh! Y traes comida.
Me quité el abrigo y
entregué las bolsas con comida a George, mientras veía como Paul dejaba su bajo
a un lado, y se acercaba lentamente.
Paul: Veo que estás
realmente bien. – Dijo casi en un susurro – Yo también me alegro verte aquí.
Tu: Muchas gracias
Paul. – Sonreí – Por cierto. ¿Dónde está John?
Un silencio inundó la
estancia y los tres se comenzaron a mirar los unos a los otros.
Paul: Pues, verás. –
Puso su mano en la nuca – John se marchó a hacer unas cosas.
Tu: Vaya. – Murmuré –
No sabía nada. Pensé que estaría aquí con vosotros, para cenar.
George: No creo que
tarde en venir. – Murmuró.
Tu: Entonces esperaré.
– Dije sonriente.
Me senté en una silla
que había por allí cerca y los chicos se pusieron a cuchichear entre ellos.
Ringo: Deberíamos
explicárselo. – Murmuró.
Ringo: Pero no me
parece bien. – Repitió.
Paul en cambio daba
vueltas con las manos cruzadas, a lo que a mi me pareció una situación extraña
e intervine.
Tu: ¿Que ocurre? –
Pregunté - ¿Dónde se ha marchado John?
George: No tardará en
venir. – Forzó una sonrisa.
Tu: ¿Qué ocultáis? –
Pregunté.
Paul: Nada. – Negó con
la cabeza y se arrodilló enfrente de mi – Salió un rato.
De repente la puerta
de los estudios se abrió de par en par y a partir de allí las cosas se
convirtieron un tanto confusas para mi.
Al parecer mi
presencia no fue notada por él y la conversación que traía con su querido amigo
Derek no fue silenciada.
Derek: Te lo dije. –
Rió – Era una diosa, Brigitte Bardot es una diosa, te la debería de haber
presentado antes.
John: ¡Oh! – Sus ojos
se abrieron de par en par, pude comprobar un tono rojizo en su piel y un estado de ebriedad. – ¡Charlie! ¿Qué? ¿Qué haces aquí?
Tal vez mi mirada fue
demasiado dura, debido a que Derek saltó simplemente con verme allí.
Derek: No es lo que
piensas Charlotte. – Alzó ambas manos.
Tu: ¿Se debían a eso
tus salidas nocturnas? ¿Brigitte Bardot? – Pregunté con el corazón dolido – No pensé que podrías
caer tan bajo.
John: Charlie. –
Murmuró. – No es lo que piensas. Simplemente hemos ido a…
Tu: ¿A conocer a
Brigitte Bardot? – Pregunté interesada.
John: Si, simplemente
a conocerla. – Asintió rápidamente.
Tu: Estás
completamente ebrio y apestas a alcohol. – Me aproximé a él – Y a lo que no es
alcohol.
Mis ojos se llenaban
de lágrimas al contemplar la escena, y a ver en lo que se había convertido
John.
John: Charlotte por
favor. – Murmuró negando rápidamente con la cabeza.
Tu: ¿Sabes? Lo he
estado pensado fríamente. – Expliqué con todo el dolor de mi corazón – Y creo
que será mejor que me marche una temporada.
John: ¿Qué te marches?
– Preguntó con la boca abierta - ¿A dónde?
Tu: Hablé con Astrid.
– Susurré – Y ella nos acogería en Hamburgo por un tiempo.
John: ¿Os acogería? –
Preguntó - ¿A Stuart? ¿A John?
Tu: Si. – Asentí
lentamente - A John.
John: ¿Vas a
marcharte? – Preguntó incrédulo - ¿Vas a dejarme?
Derek: Charlotte creo…
Tu: Tú no te metas
Derek. – Dije furiosa.
Simplemente se
escuchaba la fuerte respiración de John en la estancia junto con la mía.
John: Charlie por
favor. – Murmuró con los ojos acuosos – No puedes marcharte, no puedes dejarme,
no te puedes llevar a nuestro hijo. Lo siento, se que estos meses no han sido
como habíamos pensado, se que no he pisado casi la casa y que no he estado
junto a vosotros. – Expresó todo lo que llevaba dentro – Pero te prometo que
cambiaré, quiero pasar tiempo con Stuart, los tres juntos.
Tu: John, creo que… -
Me quedé pensativa – Creo que será lo mejor, que nos marchemos por una
temporada.
El silencio se volvió
a hacer presente en el estudio, Derek ocupó la silla que yo anteriormente había
dejado vacía.
John: ¿De verdad es lo
que quieres? – Preguntó - ¿Quieres marcharte?
Tu: Si, John. –
Murmuré – Quiero marcharme. Lo lamento.
John: Entonces no
puedo impedirlo. – Susurró.
Alcé mi mirada, contemplé unos rostros apagados y un tanto desconcertados de las personas que me rodeaban. Y tras susurrar un diminuto Adiós comencé a caminar
hacía la salida lentamente sin mirar atrás, sabiendo que si lo hiciese
cambiaría de opinión y no me marcharía.
John: Siempre fuiste
diferente. – Alzó al voz – Siempre has sabido tomar las decisiones sin
aportaciones de los demás, eso siempre me ha gustado de ti, porque no eres como
las demás. – Se hizo silencio. – Y por eso nunca te trate como lo hice con las
demás mujeres, porque eres especial, y te dejo marchar, porque te
quiero.
Paul: John…
John: ¡Déjame! – Gritó
- Y sí, estoy aquí ebrio explicándote lo que siento, delante de mis amigos,
pero me da igual. Me da completamente igual. Y si quieres marcharte, hazlo.
¡Hazlo! – Tosió y escuché como se quebraba su voz – Echa por la borda todo lo
que hemos vivido estos años.
Y con una gran
impotencia en mi cuerpo, sin saber de donde saqué las fuerzas pasé a través de
esa puerta sin mirar atrás.
Tal vez mucha gente me
culparía de intolerante o de mujer sin sentimientos, pero no podía aguantar más
tiempo una vida como la que llevaba, lo único que pedía era ver al padre de mi
hijo, compartir tiempo junto a él y con el pequeño John y algo de tiempo para
mis aficiones.
Pero nada de eso se
estaba cumpliendo, experimentaba un mar de dudas en mi cabeza y poco a poco sentía como un embudo absorbía mi vida. Al no poner John tampoco de su parte para cumplirlo, no aguanté más y marché dirección Hamburgo. Sí, huí con miedo.
BUENO COMO VEO QUE CUESTA UN POCO COMPRENDER EN QUE SITUACIÓN SE ENCUENTRAS AHORA MISMO LA HISTORIA, HE PENSADO HACER UN PEQUEÑO RESUMEN EN CADA CAPÍTULO. LO TENDRÉIS ARRIBA Y COMO PODÉIS COMPROBAR ESTE YA TIENE EL SUYO. IGUALMENTE CUALQUIER DUDA QUE OS SURJA AQUÍ ESTOY YO PARA SOLUCIONARLA, ME A ESCRIBÍS EN UN COMENTARIO QUE SERÁ RESPONDIDO.
Oh. Dios. Mío. Lara. Me. Matas. Amo. Tu. Novela. Es. Increíble. Sube. Más. Sigue.
ResponderEliminarME ENCANTA! DIOS MIO! LARA!!!!!!!!! SLFNSÑDFSDFJHPHDIFNSD ya no se ni como expresar lo que siento ahora mismo, es todo tan adkljsdlsak, MALDITO LENNON!! Pero tu novela es genial! Dios!!!!!! No puedo con esto! POR QUE CHARLIE! TE LLEVAS AL PEQUEÑO JOHN A HAMBURGO! LEJOS DE SU PADRE! POR QUE! Lara no me hagas esto!!! Por favor adsalfkñjsdfj! Quiero volver a salir, me harías un gran favor y lo sabes, porque amo tu novela y es todo tan increíble que ya no sé como decírtelo. AHORA QUE VA A PASAR CON JOHN! QUIEN LLAMARÁ AL TIMBRE! NO ME DEJES CON LA DUDA!
Dios mío Lara, tienes que subir pronto, dudo que mi pequeño corazón de Beatlemaniaca resista mucho sin saber que pasa!
Por favor. Por favor. Por favor. Por favor. Por favor. Por favor. Por favor. Por favor. Por favor. Por favor. Por favor. Tengo que salir con Ringo Por favor. *_*
Muchisisisisisimos besos y abrazos de esta loquita :3
Caray amo la novela *-* dios mio! es lo mejor que eh leido :33
ResponderEliminarjurare seguir leyendola si tu juras seguir siempre la novela y no abandonarla :333
Es increible todo esto :D
Sigue asi
abraszos! y saludos :)