19 de noviembre de 2012

46. When I get home.


Y AQUÍ LLEGA UN CAPÍTULO NUEVO DE RECUERDOS. ESPERO QUE OS GUSTA Y MUCHISIMAS GRACIAS POR LAS VISITAS Y POR LOS COMENTARIOS. 

London; Primavera, Mayo 1977

Llegué a casa cansada, después de haberme pasado toda la mañana en la galería, revisando mi exposición fotográfica.
Supuse que mi marido ya se encontraba allí y que mis hijos acabarían de regresar de colegio.

Abrí la puerta y nada más entrar al jardín aquel precioso perro se aproximó para que le acariciase.

Tu: Ya he regresado. – Informé nada más entrar por la puerta.

Por allí aparecieron dos tiernos niños corriendo para ver quien llegaba antes debajo de las escaleras.

John: Hola mamá. – Exclamó el niño de once años.

Tu: Hola cielo. – Besé su mejilla - ¿Qué tal el colegio?

John: Hoy nos llevaron a ver una obra de teatro. – Me explicó.

Tu: Que interesante. – Sonreí – Después me lo explicas en la cena.

Dejé que se marchara a seguir haciendo los deberes y cogí en brazos a la pequeña Louise, que me quería enseñar un dibujo que había hecho en la escuela.

Louise: Es una casa. – Me explicó – Estos son papá, mamá, John y yo.

Tu: Es precioso. – Le expliqué - ¿Se lo enseñaste a papá?

Louise: Si. – Asintió – Me dijo que lo pondríamos en el mural.

Tu: Pues entonces déjalo encima de la mesa, y luego lo colgamos. – Sonreí.

La pequeña asintió y marchó como su hermano escaleras arriba. Colgué el abrigo en el perchero, pero antes de ir a buscar a mi marido, él ya me había encontrado a mi.

-  Buenas tardes mi amor. – Murmuró besando mis labios - ¿Cómo te fue el día?

Tu: Agotador. – Susurré - ¿Y a ti?

Escribí algo. – Asintió – Me gustaría hablar contigo.

Tras decirme eso, pasé junto a él al salón y ambos nos acomodamos en el sofá.

- Verás he estado pensado. – Me explicó con seriedad – Sobre lo que me propusiste de ir a vivir una temporada a Liverpool. Y creo que sería una gran idea. – Sonrió – John estará encantado, porque adora Liverpool y Louise tampoco creo que se oponga, después de haber escuchado hablar tan bien a su hermano de ese lugar.

Tu: ¿Estás seguro? – Le pregunté.                                                                                  

- Por supuesto. – Asintió – Creo que a mi también me vendría bien desconectar de Londres, por algún tiempo. – Asimiló – Y Liverpool me ayudaría a acabar de componer algunas canciones.

Le abracé sin decir nada, él sabía como dentro de mi echaba de menos Liverpool y estaría encantada de regresar.

- ¿Qué te parece si esta noche se lo decimos a los niños? – Preguntó.

Tu: Me parece perfecto. – Asentí feliz.

Noté como besaba lentamente mis labios, cada beso suyo era como el primero que nos dimos, escuché unos pequeños paso detrás nuestro y nos separamos lentamente, para ver como Louise observaba atenta aquel momento.

Mi marido rió y vino para que la cogiese en brazos.

Louise: ¿Podemos ir a pegar mi dibujo? – Preguntó feliz la pequeña del pelo castaño claro.

Tu: Por supuesto. – Asentí cogiéndole el dibujo.

Louise: He encontrado un bonito lugar. – Se levantó de las piernas de su padre y comenzó a caminar hacía allí – Aquí me gusta.

Señaló el pequeño mural que habíamos creado en el despacho de la casa, y con una chincheta lo pusimos en el hueco que ella dijo.

- Subiré a ver como va John con los deberes. – Me explicó y marchó al piso de arriba.

Louise: ¿Mañana iremos al zoo? – Preguntó feliz.

Tu: Si cielo. – Asentí – Mañana sábado iremos los cuatro al zoo. – Le recordé.

Louise: Tengo muchas ganas de ir. – Asintió feliz.

Subí al piso de arriba junto con Louise y entramos en la habitación de John, donde mi marido le estaba ayudando a hacer unos deberes.

-No, mira John. – Le explicó – Multiplicas ese número por ese, y lo que te de lo sumas a ese otro.

John: Es verdad. – Asintió – Creo que ya lo entiendo.

- Cada vez ponen problemas más complicados a menor edad. – Me susurró y reí.

La pequeña Louise marchó con su padre a la bañera, que el agua ya estaba preparada. Mientras tanto me quedé con John, que se había llevado una enorme desilusión y quería saber como se sentía.

John: ¿Por qué no puedo ir este fin de semana con papá? – Preguntó mirándome con desilusión.

Tu: Este fin de semana papá no puede. – Le expliqué – Tiene unas cosas importantes que hacer. Pero me prometió que pronto os veríais, que tiene muchas ganas de verte.

John: Siempre dice lo mismo. – Susurró.

El corazón se me rompía cuando tenía que ver a mi hijo desilusionado de esa forma, unas manos rodearon mi cintura.

-  ¿Qué ocurre? – Me preguntó.

Tu: John se siente triste. – Le expliqué.

Tras besar mi cabeza, se arrodillo al lado de John y le comenzó a explicar lo bien que nos lo íbamos a pasar este fin de semana.

-¿Te acuerdas que os prometí que iríamos al zoológico? – Le preguntó y John asintió – Pues mañana nada más levantarnos iremos y después comeremos allí.

John: ¿En el zoo? – Preguntó impresionado.

-Claro. – Asintió – Veremos todo tipo de animales, cocodrilos, leones, tigres…

Louise: ¡Delfines! – Exclamó una pequeña vez desde su habitación.

-   Claro que si. – Afirmó.

Pasé el resto de tarde ayudando a John con los deberes, mientras mi marido bañaba a nuestra hija.
Fue un día largo, pero adoraba llegar a casa para compartir mi vida con aquellas personas, que siempre me la alegraban.

2 comentarios:

  1. Por lo que puedo leer es... JOHN Y CHARLIE NO SE VAN A CASAR! NO VAN A ESTAR JUNTOS! :O jfophjdsvohfoivnhsfvkhpodfuv no! NO! NO! TIENEN QUE ESTAR JUNTOS! TIENEN QUE SER FELICES JUNTOS! :'(
    Me encantó el capítulo, como todos Lara, sabes que escribes genial :)
    Sube pronto!
    Muchisisisisismos besos y abrazos :3

    ResponderEliminar
  2. acabará con Paul ¿a que si? oooh me encanta *-* me encanta la pareja que haceeeen *_* es que creo que a JOhn no le pega Charlie, le pega alguien ás compleja :)

    Sigue escribiendo pleaaaseee :D

    pDT: Lo siento por no comentar antes, no he estado atenta al internet u__u

    ResponderEliminar