26 de febrero de 2012

10. Photographs.

Londres; Primavera 1963

Me encontraba en los estudios, los chicos habían finalizado las canciones que se introdujeron en el LP de Please Please me, lo sacaron el mes pasado, en Marzo y fue un éxito asombroso. Había alcanzado en número uno de las listas británicas y este mes  tenían pensado sacar el nuevo sencillo From Me to You. El mes pasado hicieron una pequeña gira en la cuál les acompañe y para Mayo a Junio tenían otra pequeña gira pensada por Reino Unido.

Brian: ¡Chicos! – Dijo al vernos – Si que habéis tardado.

George: Cuando veníamos hacía aquí nos encontramos con un par de grupos de fans – Le informó – Y nos hemos retrasado.

John: Tú ya tenías el retraso Harrison – Le dijo cogiendo la guitarra.

Brian: John, compórtate – Le riñó.

George: ¡Eso John compórtate! – Repitió – Y ponte las gafas que no sabes ni por donde vas.

John le sacó la lengua y le hizo un gesto grosero con el dedo, a lo que George negó con la cabeza.

Ringo: ¿Cuál vamos a ensayar hoy? – Preguntó sentado en la batería.

Paul: Empezaremos con Love me do – Dijo mirando su bajo.

John: ¡Hey! – Se quejó mirando mal a Paul – Empezaremos con Twist and Shout.

Paul asintió y empezaron a tocar la canción, mientras tanto yo me dediqué a hacer parte de mi trabajo. Cogí la cámara de fotografiar y comencé a hacerles fotografías tocando, la verdad es que en cada una de esas fotos se notaba como disfrutaban tocando en grupo y lo bien que se lo pasaban. Aunque a veces era un poco complicado sacar una fotografía buena, debido a que algún miembro del grupo siempre hace el tonto.


Tu: John deja de poner caras – Dije intentando sacar una buena foto – Va Johnny.

En este poco tiempo que había estado con ellos, me había sido demasiado fácil entablar una buena relación con cada miembro del grupo. Se comportaban tal y como eran, no cambiaban su actitud por su fama que iban cogiendo, si no al contrario les gustaban a la gente a parte de por la música, por la forma de ser tan simple que tenían.

Tu: Perfecto chicos. – Dije al haber acabado de fotografiarlos – Luego las revelaremos y se verán. Aunque las tuyas John, no te prometo nada….

John: ¡Hey! – Se quejó – John Lennon sale hermoso, como es él en cualquier foto.

Ringo: ¿Hermoso? – Dijo riéndose.

John se giró y le miró seriamente, y el pobre Richard cesó la risa.

John: Con un trombón como el tuyo no sé de que te ríes – Le dijo serio.

Brian: ¡Winston! – Le chilló.

John: Sabes que no me gusta que me llamen así –Dijo con tono de enfado.

Brian: Ni a mi tampoco me gusta que te metas con Ringo – Le explicó.

John: Comenzó él – Informó.

La puerta del estudio se abrió y dejó paso a George Martin, para percatarse de cómo iban los chicos.

Martin: ¿Cómo van? – Preguntó chocando las manos.

George: Yendo. – Soltó serio.

Martin: Muy bien – Dijo sonriendo – Si necesitan algo ya saben donde me encuentro.

Y dicho esto salió del estudio para visitar a los demás. Me encontraba cambiando el carrete de la cámara en el estudio cuando sentí como tenía a alguien detrás de mi.

Tu: ¡Hey James! – Dije girándome y topándome con él - ¿No seguís ensayando?

Paul: Por supuesto – Dijo sonriendo – Pero hemos decidido hacer un pequeño descanso, y he decidido venir a conversar con una preciosa señorita que se encuentra cambiando un carrete de cámara.

Me reí al escuchar esas dulces palabras sacadas de los labios de Paul, y continué cambiando el carrete.

George: ¡Paul deja de perder el tiempo! – Chilló desde su silla – No le interesas.

Paul se giró y le hizo un gesto para que guardase silencio, mientras en mi interior me estaba empezando a reír.

Paul: Bueno y ¿Cuándo vas a revelar las fotografías? – Me preguntó cortés.

Tu: Me imagino que ahora cuando salga – Le informé.

Paul: ¡Ah! Claro, que estúpido – Dijo riéndose – Y, bueno…

Pero antes de que el joven McCartney finalizara su frase, Lennon con sus gafas de pasta negras apareció por detrás de Paul.

John: ¡Hey! – Dijo mientras se comía una manzana - ¿Vas a ir a revelar luego las fotografías?

Paul: Si, John – Dijo con desesperación – Cuando acabemos el ensayo.

John: ¡Ah, bien! – Dijo dándole un bocado – Te acompaño ¿Vale? Así veo mis hermosas fotografías.

Tu: Por mi estupendo Johnny. – Dije sonriendo.

Paul miraba a John con enfado pero a la vez con indignación, sin saber que decir. Y continué sin prestar mucha atención a las conversaciones que tenían.

John se marchó con los demás y fue seguido lentamente por Paul, que cogió su bajo y le dio alguna que otras punzadas creando una dulce melodía.

El ensayo no duró mucho más de lo que estaba previsto, pero entre alguna discusión que otra se pudo alargar unos cuantos minutos de más.

Brian: ¿Ahora irás a revelar las fotografías? – Me preguntó bajando por las escaleras.

Tu: Si – Le respondí.

Brian: Perfecto. – Dijo sonriendo – Mañana estarán listas ¿No?

Tu: Por supuesto – Le dije – Mañana las tendrá aquí como siempre.

Brian: Me parece estupendo Charlotte. – Dijo asintiendo – Entonces mañana a las doce te espero para recoger las fotografías y así ya las tenemos listas.

Ringo: ¡Hey John! – Le gritó al ver que no se esperaba - ¿Dónde vas?

John: Voy a acompañar a Charlie a revelar las fotografías – Le respondió.

George: ¿No vienes a comer? – Preguntó.

John: ¡Ay! No lo sé – Dijo molesto bajando los escalones.

Acababa de entrar por la puerta Susan acompañada de otra chica que no reconocí.

Susan: ¡Charlie! – Dijo acercándose a mi – Cuanto tiempo. Al parecer no coincidimos tanto como desearía.

Tu: Hola Susan – Dijo saludándola – Pienso lo mismo. Creí que nos veríamos más.

Susan: ¿Cómo te va todo? – Preguntó sonriendo - ¿Todo bien?

Tu: Muy bien – Respondí – Estoy muy a gusto y adoro lo que hago. ¿Y a vosotros? ¿Cómo esta Nathan?

Susan: Perfectamente – Respondió – Nathan esta acabando de pasar una entrevista para enviarla a la revista. ¡Ah! Por cierto, Charlie, ella es Sally mi hermana.

Saludé a la chica rubia que se encontraba a su lado, la verdad es que tenían rasgos idénticos de los cuales no me había percatado.

Tu: Mucho gusto. – Dije dándole la mano.

John: ¡Lennon! John Lennon – Dijo interponiéndose entre nosotras y cogiéndole la mano.

Sally: Ah, hola – Dijo sonriéndole y asintiendo – Mucho gusto.

John: ¿Le han dicho alguna vez que es usted una hermosa dama? – Dijo sonriendo y poniendo su voz melodiosa.

Susan comenzó a reírse y se acercó a saludar a Brian y a los demás chicos, mientras John hacía de galán con la joven Sally.

George: Vas a acabar desesperando a Paul – Dijo acercándose a mi.

Tu: ¿Desesperando a Paul? – Pregunté sonriendo y sin comprender.

George: Si. – Asintió – Conseguirás que acabe por los suelos deprimido, y después los demás lo tendremos que soportar.

Tu: ¿A que te refieres George? – Dije riéndome.

George: Déjalo. – Dijo negando con la cabeza – Pero sal algún día a cenar con Paul, y anímalo.

Asentí como si nada sonriendo, era mi amigo, claro que saldría a cenar con él. John finalizó de conversar con Sally y se acercó a George y a mi.

John: ¿Qué ideas le estás metiendo en la cabeza a mi dulce Charlie? – Dijo acercándose por detrás.

George: ¿Qué quieres John? – Le preguntó molesto – Le estoy sacando las horribles ideas que tú le metiste.

Ringo: ¡Hey chicos! ¿Nos vamos? – Preguntó acercándose.

Paul: Si, será mejor que nos marchemos. – Dijo sin ganas.

John se acercó lentamente a Paul, y le preguntó si le ocurría algo, pero Paul le respondió que no, con una forzada sonrisa.

Los chicos se marcharon, excepto John que me acompañó a un estudio para revelar las fotografías.


Tu: ¿Qué le sucedía a Paul? – Pregunté con interés a la vez que cambiaba la fotografía a la banqueta del agua.

John: No me contó – Dijo encogiéndose de hombros – ¿Le dejaría plantado una dama? O tal vez ¿No hubo dama anoche? – Alzó y bajó rápidamente las cejas.

Tu: Ay, John no seas así. – Dije riéndome y dándole un pequeño empujón hacía atrás.

John: ¿Y tú como? – Me preguntó encendiéndose un cigarrillo. 

Tu: ¿Cómo de qué? – Le pregunté acabando de revelar una de las fotografías.

John: ¿Pasan mucho hombres por tú nueva residencia? – Preguntó dando una calada.

Hace unas pocas semanas me instalé en un ático que me había conseguido Brian, no muy lejos de la casa de los chicos.
 
Tu: A parte de vosotros cuatro y Brian… - Dije pensativa – Ninguno.

John: ¿Ninguno? – Preguntó con asombro - ¡Me tomas el pelo!

Tu: ¿A John Winston Lennon? – Dije irónicamente – Por favor nunca me atrevería, a hacer una cosa semejante.

Lennon entre cerró los ojos y frunció el entrecejo, apagó su cigarrillo después de darle la última calada y se acercó lentamente a mi.

John: Ha ha ha – Dijo lentamente.

Negué con la cabeza evitándome reírme de él y continué hasta finalizar de revelar las demás imágenes.

1 comentario: